viernes, 3 de enero de 2014

Gran 2013 y esperando un mejor 2014!

Empiezo el 2014 con muchas ganas de todo. Me siento muy bien (aunque ahora tengo que descansar una semanita por unas molestias en el gemelo :'(  ) y con ganas de seguir en la misma linea que he acabado el 2013.

2013 ha sido un año de muchos cambios, empezando por mi debut en la diabetes. Aquello desencadenó una serie de hechos que me han llevado hasta lo que soy ahora y a como vivo hoy... y la verdad no podría estar más feliz. 

He pasado por varios altibajos (igual que mi humor con las hipos... Jejejej) desde que debuté. Desde el primer día siempre he tenido una pequeña lucha interna entre pensar: que jodido esto de la diabetes, y por otro lado verlo como algo positivo que me ha hecho despertar y empezar a disfrutar del día a día. Y estoy feliz, por qué creo que lo positivo ha ganado. La enfermedad va a estar ahí, siempre ahí ( o no! Quién sabe lo que nos depara el futuro... sólo sabemos que es crónica hasta hoy...) y por el mismo precio puedes lamentarte, o levantarte cada día con ganas de disfrutar de esta maravillosa vida con los que te rodean. 

Nada hubiera sido igual sin el apoyo de mi mujer. Se que no ha tenido que ser, ni será, fácil toda la adaptación, aguantar los cambios de humor, contar raciones, comer a la hora justa,... Des de aquí le quiero dar las gracias para siempre, porqué sin ella, seguro que hoy no estaría escribiendo estas palabras. Gràcies guapa!

Si alguien me hubiera contado a principios de 2013, que a día de hoy disfrutaría corriendo y haciendo maratones de montaña y que tendría un trabajo dónde estaría a gusto y con un horario que me permitiera tener tiempo para todo lo que quisiera hacer, le habría suplicado que me dijera cómo iba a conseguirlo. 
Des de mi punto de vista, el peaje ha sido muy barato. El hecho de abrir los ojos, ver lo que importa y poder disfrutar de lo que realmente vale la pena, no tiene precio.

Y ahora estoy con muchas ganas de dar más de mí en este 2014. Con ganas de compartir aún más tiempo con mi mujer y mi hijo, con ganas de salir a correr cada día para preparar los 73Km de Long Trail de la UTBCN, y sobretodo de disfrutar cada momento!

Des de aquí quiero agradecer y desearles lo mejor, a toda la gente que ha compartido un poco de su tiempo conmigo este 2013! Y sobretodo, a toda aquella gente que la diabetes me ha permitido conocer. Sois muy grandes!

Y no me olvido de todos vosotros, a las más que inesperadas 5000 visitas, daros las gracias por seguirme! Y os animo a todos a participar más activamente en este blog!

Un abrazo para todos!

Àlex

lunes, 2 de diciembre de 2013

Comenzando una nueva etapa!

Hoy ha sido mi primer día de trabajo! Estoy muy contento ya que no creo que hubiera podido comenzar mejor. Bueno, empezaré la historia por el principio:

Como ya os comenté en un entrada anterior, desde Septiembre estaba buscando trabajo.Un trabajo que me permitiera tres cosas: poder seguir disfrutando de mi familia y de mi nueva pasión: el trailrunning y poder controlar como hasta ahora la diabetes. Teniendo en cuenta todo esto, imaginé cuál seria mi trabajo ideal: un trabajo de lunes a viernes, con jornada intensiva a poder ser de mañana, tareas más de back office que de cara al público, es decir, un tipo de trabajo "tranquilo" en el cuál tienes que hacer X en un tiempo Y, en el que tu decides como organizarte además de con un  sueldo que me permitiera mínimo pagar todos los recibos a final de mes. Pensé que este sería el trabajo ideal para poder así seguir disfrutando día a día cómo lo estaba haciendo hasta ahora estando en el paro.

Por otra lado, mi cabeza tenía un lucha diaria. Por una parte, tenía ganas o necesidad de encontrar un trabajo ya que los días iban pasando, los días del subsidio iban disminuyendo y el 3 de diciembre pasaba a cobrar sólo el 50% lo que significaba que tenía que empezar a tirar del colchoncillo para llegar a final de mes). Pero por otra parte, en mi cabeza estaba la Mitja Volta de la Ultra trail de Collserola. Una carrera en la que tenía puesta mucha ilusión y ganas y que quería prepararme a conciencia  para poder disfrutarla al máximo y hacer un buen tiempo. El problema es que esta carrera era el 23 de noviembre, así que en mi mundo ideal la idea era empezar a trabajar la semana siguiente de la carrera, antes de la disminución del subsidio. Durante los meses previos a al carrera, hice un par de entrevistas en los que finalmente se me ofreció el trabajo, pero por una razón o otra los acabé declinando, en ningún caso cubrían todos los requisitos y yo creía o pensaba que me merecía algo mejor. Pero durante el mes de noviembre no hice ninguna entrevista, y los fantasmas y medios empezaron a rondar en mi cabeza. Fui un insensato al rechazar esas ofertas, teniendo en cuenta la situación en la cuál vivimos, con hipoteca y guardería que pagar? Tendría la oportunidad en le futuro de encontrar algo mejor o igual a lo que me habían ofrecido? Acabaré viéndome obligado a aceptar un trabajo peor porqué ya el colchoncillo no da para más? Y claro está, estas preguntas, dudas, miedos..... te pueden machacar mucho. Te hacen sentir culpable e irresponsable. Algunos días los viví así, con miedo....pero la verdad es que la mayoría los vivía pensando y creyendo que ese trabajo soñado  me merecía llegaría tarde o temprano.

Y como son las cosas... El 27 de noviembre me llama Carlos, mi ex-jefe del hotel en el que trabajé en Zaragoza, y me dice: Àlex sigues buscando trabajo? Tengo un trabajo administrativo, de lunes a viernes de 9h a 18h en el aeropuerto de Barcelona (a 20 minutos de casa!). Te interesa? Imaginaros mi cara, la de mi mujer, la de mi familia y la de mis amigos! Qué pasada! El trabajo que quería y cuando lo quería! No me lo podía creer... Después de los saltos de alegría, abrazos, lloros y demás llegó el momento de empezar a planificar el día a día. Aquí entraron de nuevo las dudas: podré salir a correr? tendré tiempo para estar con mi familia? En su momento creía que este tipo de trabajo me lo permitiría, pero sería verdad? Así que tocó empezar a planificar las tardes y los fines de semana. Sobre el papel la verdad que pinta muy bien, pero todos sabemos cómo es el día a día! Pero estoy tranquilo,porque sé que sólo depende de mi el encontrar tiempo para estar con ellos y para salir a correr!

Y hoy ha sido mi primer día, y ahora, escribiendo esta entrada, pienso que firmaría dónde fuera que todos los días de mi vida fueran igual! Nos hemos levantado los tres juntos por la mañana, he llevado el pequeño a la guardería, en moto hasta el trabajo, formación del puesto de trabajo (glucemias más que perfectas y ritmo de trabajo perfecto para poder mirarme el azúcar cuando sea necesario y comer), en moto a casa, estar un ratillo con la família, 10Km con frontal por mi Collserola, duchita, disfrutar con el peque antes de la cena, cenar los 3 juntos y escribir un entrada en el blog, para reafirmarme en que la vida es maravillosa y así estar más que seguro de que todo lo que nos proponemos los podemos conseguir, solo hace falta confiar hasta el final!!

lunes, 25 de noviembre de 2013

Mitja Volta de la Ultratrail Collserola

Tenía muchas ganas de que el día llegara, muchas ganas de darlo todo y más...pero no pudo ser. Era una carrera que tenia en mi cabeza desde el día en que me inscribí. Era la carrera perfecta para poder disfrutar de cada Km. Corría en casa, por los mismos senderos y pistas dónde salgo habitualmente, y no lo pude saborear tal y como lo había previsto...

Me imagino que fue ese cocktail de emociones el que me hizo levantar el pasado sábado 23, a las 7 de la mañana, con las pulsaciones por las nubes. No había dormido casi nada, más nervioso que nunca, peor que un niño la noche de Reyes... No había manera de que el corazón bajara su ritmo (paradojicamente hacía cuatro días me habían hecho una electro y me dijeron que mi corazón había hecho una muy buena adaptación a diabetes...) Me preparé mis isostars, me puse el traje de guerra y directo a Can Caralleu, dónde tenía lugar la salida a las 9:30h.

Allí me encuentro con Marc Mitjans (un crack finisher de la UCV que quiere bajar de las 4h30!). Azúcar en 150 mg/dl y desayuno mi bocadillo de jamón dulce. Mi corazón sigue a la suyo, y yo cruzando dedos para que cuando suene el pitido de salida, la cosa se tranquilice. Entramos al parque cerrado de los corredores y empezamos a calentar el cuerpo (hace mucho frío!). En ese momento, nos vienen a hacer unas preguntas para La Vangaurdia TV (salimos los 2 a partir del minuto 1:21, y por lo que veo, mis aportaciones fueron muy muy interesantes.... jejejeje. Aquí os dejo el link). Seguimos calentando un poquito más y nos avisan que en breva ya dan la salida. Pam! 500 runners salimos disparados a comernos esos 43Km.

Era la tercera vez que corría esa distancia. La última fue la Marxa del Garraf, que fueron 45Km y un desnivel muy parecido de 3000m acumulado. Esa la termine en 6:37h, y mi idea era poder bajar en esta de las 6h.

Me pongo mi música, y me dispongo a poner un pie delante de otro. Al principio todo bien, supongo que con la emoción de la salida no te da tiempo a escuchar a tu cuerpo y tus sensaciones. Voy tirando y tirando bien hasta que veo que en los llanos me cuesta correr. Me empiezo a dar cuenta que en las subidas cuando voy andando, las pulsaciones no bajan y no tengo manera de recuperar. La cabeza se me nubla bastante y me cuesta centrarme en cualquier cosa, no veo nada claro. En eso llego al primer avituallamiento, a los 11Km. Ahí veo a mi niño, mi mujer Myriam y a mi madre animándome. Me alegra mucho verles y me quedo unos segundos con ellos mientras me como 4 cachos de plátano. Azúcar en 120 mg/dl. Mi madre me pregunta cómo estoy y le digo que mal, que las piernas no responden y el corazón va disparado y me cuesta respirar. Me dice que voy demasiado fuerte, que he llegado antes de lo previsto y que baje el ritmo. Yo le digo que no, que no estoy bien y no es normal que no me recupere en las subidas y me cueste correr en llano.


Llegando a Santa Creu

En Santa Creu con mi madre y mi hijo

En Santa Creu con Myriam
Con eso sigo adelante. Al Km 15, después de unos 3Km en constante bajada me doy cuenta que no estoy muy bien, me adelanta mucha gente en bajada y yo veo que me cuesta y mucho. Decido empezar a caminar tanto en rectas como subidas, y dejarme caer por las bajadas... Por suerte es un tramo con más desnivel negativo. No paran de adelantarme personas y me empiezo a frustrar mucho. Era la carrera dónde lo quería dar todo, disfrutarla al máximo y me encuentro que no estoy bien, me cuesta respirar, tengo la cabeza nublada y no puedo ni correr en llano! Cojo el móvil y envió un whatsup que no estoy bien. Me esperan de nuevo en el siguiente avituallamiento (Km 24). Llego que no se ni como....; frustrado, agobiado, enfadado, cansado, asqueado... Mi madre me pone una chaqueta encima y me pide que me siente y que no sería mala idea abandonar... Esto me deja trastocado. Abandonar? Ni de coña, sea como sea yo paso esa linea de meta, tarde 6 o 8 o 12 horas, me da igual. A lo que les doy un beso a los 3, cojo mis plátanos (azúcar en 109 mg/dl) y sigo tirando.

Llegando a La Salut con mi madre
Subiendo hacia el Puigmadrona, comiéndome los plátanos se me queda uno ahí en medio que no baja hacía el estómago. Empiezo a correr por la bajada y me empiezo a marear y me empiezan a venir arcadas. Después de un par de minutos mirando al suelo y algo menos en la barriga, me planteo si dar media vuelta hacia el avituallamiento para abandonar o seguir tirando (nunca me había pasado antes...), pero justo empieza una canción que me alegra mucho el día a día (Aquí os dejo el link!)y empiezo a tirar. Me sigo sintiendo muy raro y me empiezan a dar lo que creo que son rampas (tampoco me había pasad ante eso!!) Pero que he hecho yo para que me pase de todo hoy? No sé como los Km y las rampas van pasando, andando mucho sigo avanzando... Gracias a no se qué ni como consigo llegar al tercer y último avituallamiento del recorrido en el Km 38. Me empiezo a animar, veo que mi familia está más animada y tranquila que hace unas horas y eso me da un extra. Besos a todos, no paro ni un segundo en el avituallamiento y cómo si me acabará de levantar de una siesta de dos horas, dejo las rampas, las pulsaciones y los malos pensamiento atrás y me dedico a darlo todo en los últimos 5Km. Quiero disfrutar ni que sea esos últimos 5Km!!


Llegando a Santa María de Vallvidrera

Saliendo disparado del último avituallamiento

La verdad es que el apoyo de los voluntarios y de la gente que nos esperaba ver pasar me ayudó mucho a ir tirando y tirando sin importar cómo me encontraba. Así que salí a disfrutar esos últimos Km y encima adelanté a alguno (eso era lo de menos, pero me hacía ver que estaba mejor)! Pasan los minutos y ya veo Can Caralleu ahí abajo. Varias horas atrás, no veía que eso fuera posible... Me emociono y mucho por qué lo había pasado muy mal, nunca lo había pasado tan mal... Y finalmente encaro la recta final, cojo a mi niño en brazos y con mi mujer al lado cruzamos la meta! 5:38h!

Entrando a meta con mi niño y Myriam
En la meta con mi pequeño

Tiempos de la carrera
 
Que ilusión, que ganas de poder tirarme al suelo y olvidar todo aquello por lo que había pasado horas atrás! Y encima lo hago por debajo de mi tiempo previsto! La verdad, más contento no podía estar, pero no creo que fuera ni por el tiempo ni por acabar la carrera, sino porqué acababa ya el sufrimiento y no tenía que superar más barreras ni complicaciones.

Por la noche recibí un whatsup de Serafín Murillo preguntando que tal la carrera, así que le conté todo tal y cómo había ido. Me dijo que esas sensaciones (pulsaciones disparadas, ahogo, cabeza nublada) podían venir por hiperglucémia (pero los resultados de las glucemias eran más bien bajos) o por nervios. Me parece que compro claramente la segunda! Cómo las ganas y las expectativas pueden llegar a crearte ese estrés y nervios y jugar en tu contra... ! Bueno, quiero pensar que tenía que ser así por que era lo mejor y podía sacar algo bueno de ello... Supongo y sobretodo espero poder leer lo positivo de todo esto, a parte de que tengo mucha gente alrededor que me apoya, se preocupa por mi y me quiere mucho!

Mi preciosa familia!
Ah! Acaban de publicar el vídeo oficial de la carrera y salimos los 3!! Id a este link y esperaros la minuto 6:49! Que ilusión!

Para finalizar quiero también desde aquí dar las gracias a todos los que me apoyaron  y sobretodo a mi mujer, mi niño, mi madre y Emili por estar ahí en los avituallamientos y ayudarme en todo!

PD: Y no quiero acabar sin felicitar a 3 cracks: Marc que finalizó con un tiempazo de 4:49h, Pol con otra tiempazo de 5:03h y a otro crack diabético, David, que hizo la Ultra de 74Km en 10:34h! Enhorabuena chicos!

jueves, 17 de octubre de 2013

Miedo a que todo sea como antes?

Como ya os conté en la presentación de este blog, decidí dejar el trabajo unas semanas después que me diagnosticaran la diabetes. El 28/05 fue mi último día. Creo que fue una de las mejores decisiones que he tomado hasta día de hoy.

Esta decisión no la hubiera podido tomar sin el apoyo incondicional que tuve de mi mujer y mi familia. Yo ya estaba mal en el trabajo antes de la diabetes: muchas horas, mucho estrés, vómitos antes de ir a trabajar,... Debería haber tomado esta decisión incluso antes de la diabetes, pero el día a día y las responsabilidades que nos metemos en la mochila, supongo, no nos dejan tiempo para pensar las cosas ni 5 minutos al día. Tuvo que ser la diabetes la que me abriera los ojos, y por ello doy las gracias.

No fue una decisión fácil: hipoteca, guardería, deudas... Pero con el apoyo de mi mujer decidimos que era momento de centrarme un poco en mi y en la diabetes. Así que en el momento de mi vida, dónde más responsabilidades tenía y mejor puesto de trabajo, lo dejé. Gracias a eso, más de 5 meses después, puedo decir que mi vida a dado un giro de casi 360º. Con esto no quiero decir que mi vida antes no fuera buena, si no que no la aprovechaba, no la podía disfrutar como deseaba y como se merecían los de mi alrededor.

En estos 5 últimos meses, he podido disfrutar de lo que realmente importa, mi familia. He podido dedicar más tiempo a mi hijo y a mi mujer (aunque aún se merecen mucho más) y he descubierto algo que me apasiona: el trail running. La verdad, creo que antes de la diabetes ni en mis mejores sueños, podía imaginar que mi vida a día de hoy seria así. Por otra parte, está mi amiga y compañera de por vida ya : la diabetes. He pasado por momentos difíciles (y los que me esperan, me imagino), pero estoy contento porqué sobretodo gracias a mi mujer, he podido aprender de los baches que he pasado y sacar lo positivo. En realidad no me puedo quejar en absoluto porqué me de la impresión que han sido pocos. Tengo más recuerdos positivos: de los primeros entrenamientos dónde conseguía controlar bien el azúcar, de los cambios en las pautas de insulina que salían bien, de la gente con quién lo he podido compartir y me han ayudado (tanto familiares y amigos de siempre, como nuevos amigos diabéticos que he conocido online (Vamos Diatlétics!)), el empezar a conectar mi cabeza con mi cuerpo,...

Ahora bien, con mi mujer ya hablamos que en Septiembre me volvería a poner en marcha, y que empezaría a buscar trabajo. Des de que el 1 de Septiembre de 2013 llegó, por mi cabeza no han parado de pasar millones de pensamientos y sensaciones totalmente contradictorias que creo es momento de analizar (45 días después...). Por una parte, soy consciente que un día u otro tendré que volver a trabajar, aunque por primera vez en mi vida me he dado cuenta  de que se vive muy bien sin ello. Al cumplir los 18 comencé a estudiar la carrera de turismo y me busqué un trabajo para pagarme una parte de mis estudios en la universidad. Des de ese día ya no he parado hasta este mayo pasado. Durante muchos años ha sido lo único me hacia sentir realizado y bien conmigo mismo. Quería más y más. Llegué a ser subdirector de hotel en Zaragoza, durante la Expo, con 21 años. Pero llegó un día en que esas ganas de más trabajo y responsabilidad me superaron. No lo disfrutaba, lo pasaba mal,.... y así estuve durante unos años. Creo que una de las cosas que me frenan a la hora de empezar a trabajar ahora es justamente acordarme de esa sensación. Ahora sé lo que no quiero para mí, y supongo que mi cabeza relaciona inconscientemente el trabajar con sentirse mal. Necesito un trabajo que me permita estar todo lo que quiero con mi familia y poder salir a correr. Además, creo que lo más importante es encontrar un trabajo donde pueda compatibilizar el ritmo del mismo con un buen manejo de la diabetes.

Actualmente, al estar en casa, tengo siempre el tiempo necesario para mirarme el azúcar, comer lo que necesito,.... lo cual me permite tenerlo todo controlado. Ya llevo unas semanas en que las hipos van menguando, lo cual me da cierta tranquilidad, pero a pesar de eso sigue siendo un factor negativo. En los trabajos que he hecho anteriormente, trabajaba cualquier día de la semana, cualquier turno y sin un horario establecido para la  pausa. A día de hoy, no me veo pudiendo desempeñar un trabajo así. Creo que necesito un trabajo con cierta estabilidad en cuanto a los días y horarios se refiere. Un trabajo dónde tenga mi descanso fijo para comer ( siempre a la misma hora), y dónde tenga la tranquilidad de poder tomarme mi zumo para recuperar la hipo si es necesario. Esto en mis anteriores trabajos hubiera sido imposible. Evidentemente con los nuevos "requisitos" que necesito para trabajar a gusto, no espero cobrar lo que cobraba antes, aunque la verdad tampoco lo necesito. Creo que sería muy feliz trabajando de lunes a viernes, de 9h a 18h, con mi pausa a las 14h para comer, en un trabajo delante un ordenador, dónde me podría mirar el azúcar a las 11h y comerme mis 3 galletas para llegar bien antes de la comida. 

Hasta la fecha, ya he hecho un par de entrevistas. En una me llamaron la misma tarde para darme el trabajo. En la otra, un amigo que trabaja ahí, me informó que les había gustado y que pensaban en mi para cubrir la vacante. A la primera le dije que muchas gracias pero que no era el tipo de trabajo que estaba buscando. A mi amigo le comenté que el trabajo me parecía muy atractivo, pero el horario era incompatible, así que no me interesaba. Espero y deseo encontrar este trabajo que me permita llevar bien la diabetes, y tener el tiempo para lo que realmente importa.

Soy consciente de que a medida que pasen los meses y los años, la diabetes será distinta y también mi control sobre ella. Y estoy seguro que la diabetes no tiene que ser un inconveniente para desempeñar cualquier tipo de trabajo, pero si veo que las necesidades que tengo ahora son unas, y no las puedo obviar. Me encantaría poder aplicar para cualquier oferta de trabajo que fuera interesante, sin tener que preocuparme tanto de horarios y demás....pero estoy tranquilo porque se que ese día llegará y podré hacer lo que más me apetezca!

PD: si hay alguien que esté leyendo esto y este buscando a alguien para cubrir una vacante por la zona de Barcelona que cumpla estos requisitos, que me lo comente en este post y le enviaré mi CV!

martes, 8 de octubre de 2013

1º Marxa de Resistència La Mola - Santa Perpètua

Tenía muchas ganas de que llegara este día. Estaba deseando ver como mi cuerpo y mi azúcar respondían a esos 42Km con un desnivel acumulado de más de 3000 metros.

Gracias al dietista-nutricionista Serafín Murillo, investigador del CIBERDEM, que hizo lo posible para que nos viéramos antes de la marcha, encaré este reto con más tranquilidad y seguridad. Me dijo que probáramos a bajar la Lantus la noche anterior y programamos un desayuno un poco antes de la salida sin insulina rápida. Durante la marcha, un mínimo de 3 raciones cada hora si el control de la glucemia así lo pedía (así que me tocaba mirarme el azúcar cada hora).
Con toda esta información, me hice mi pequeño esbozo de lo que podía ser la carrera, calculando sobre que horas iba a llegar a los avituallamientos (cuando realmente no sabia ni que ritmo podía tener en estas distancias!), ver que podía tomar y cargar la mochila para esos momentos dónde tenía que tomar algo y no tenía ningún avituallamiento cerca (cargué la mochila que parecía que iba a montar un pic-nic para 20 personas!). La verdad es que disfruté con todos estos preparativos. Con la diabetes, todo toma una dimensión distinta. No es sólo conocer tu forma física para saber como encarar bien ese entreno o carrera o marcha y poder disfrutar a lo largo de ella, sino también pensar el "combustible" que va a necesitar tu cuerpo. Lo divertido es que esa cantidad de "combustible" nunca es la misma, y la pauta se tiene que ir regulando. No es lo mismo lo que necesitas cada hora cuando llevas ya 4 horas dándole a las piernas, ni cuando llevas esas 4 horas corriendo o caminando o haciendo caco, ni cuando hace 5 o 10 años que eres diabético, ni cuando estás estresado... Así que cuando uno llega al final, y ha podido disfrutar y controlarlo, hay una sensación de doble victoria. Y la verdad que al tener que estar pendiente de tus "sensaciones", me imagino que me ayuda a escuchar mejor a mi cuerpo, tener más conciencia de mi mismo y ver que puedo o debo hacer en cada momento.

Total, que por fin llegó el domingo y el reloj sonó a las 5 de la mañana! Me levanto a 80 así que me tomo un zumito, me ducho, me pongo mis trapos nuevos de Hoko, me preparo mis Isostars y a la calle. Emili me recoge y nos vamos a Santa Perpètua. Recogemos dorsales y nos subimos al autocar. Este nos lleva hasta el Coll d'Estenalles.



Dorsal 
De camino me tomo mi desayuno que me permite empezar a 180 mg/dl la marcha. Por una parte, tengo muy claro que este es un día para disfrutar, ver lo que me pide el cuerpo durante esas horas de marcha, y ver como responde mi cuerpo después de unas horas dándole a las piernas. Así que con toda al paciencia y calma del mundo tomamos la salida a las 7:40h. Me conozco, y si por mi fuera, ya estaría corriendo hasta La Mola. Suerte que voy con Emili, que está más que curtido en estas distancias, y sé que al final vamos a llevar un ritmo dónde estaremos cómodos durante los 42Km. Así que me quito el chip de carrera de la cabeza, y me lo tomo como un entreno, como una experiencia que me va a servir para las próximas marchas o carreras de distancias similares.
Al principio nos esperan 6Km de subida hasta La Mola. Un terreno bastante técnico y muy divertido. Empezamos andando a buen ritmo y trotando en las bajadas. Llegamos arriba después de 1 hora, y azúcar en 107 así que me tomo mis 3 raciones de Isostar.
 
De camino a La Mola


La Mola
 
Desde allí empezamos la bajada hasta el Km 13 con un desnivel de 600 metros. Es una bajada bastante técnica con unas vistas muy bonitas. Estos primeros 13Km los compartimos con Paco y David, unos compañeros de Emili del Centre Excursionista Independent. Lo bueno es que Paco corre en casa y se conoce esto de maravilla, así que lo vamos siguiendo.
 
 
 
Llegamos al primer avituallamiento después de 2 horas y azúcar en 98 mg/dl. Nos lo tomamos con mucha calma y me tomo un bocadillo de jamón y un vaso de Coca-Cola. Un buen rato después salimos y encaramos la segunda subida del recorrido. Cruzamos por un rio y tomamos una pista que va subiendo y subiendo hasta el segundo avituallamiento en el Km 19. Después de 3 horas, azúcar en 78 mg/dl (que justillo!), así que me tomo 3 de Isostar, 2 rodajas de sandía y 1 plátano.
 
 



Arrancamos de nuevo y seguimos subiendo por la pista hasta que llegamos al Puig de la Creu.


 

A partir de ahí empezamos otra bajada de más de 5Km, por algunos sitios bastante técnicos. Emili va delante y yo lo sigo. Ya llevamos unos 23Km cuando mi pie no llega a superar una piedra y me caigo de cara en plena bajada. El golpe es bueno. Pierdo las gafas y me clavo el bidón de Isostar en todo el costillar. Mi primera caída en la montaña!! Emili me dice que si no me he roto nada no es importante, así que me sacudo todo el polvo que puedo, me tiro agua encima de las heridas de guerra y seguimos tirando! Llegamos al tercer avituallamiento en el Km 27 después de 4 horas. Azúcar en 86 así que me como 1 plátano y 3 vasos de zumo de piña. Me cambio de calcetines ya que me noto los pies bastante sensibles. Con los pies más secos arrancamos de nuevo. Ahora nos esperan unos cuantos quilómetros de pista y la última rampa de la marcha! Seguimos trotando con unas sensaciones muy buenas, a pesar de los pies que me los noto muy sensibles. Me rallo un poco con lo de tener el azúcar siempre al límite, pero me alegro porque me esta permitiendo hacer la marcha con tranquilidad y sin hipos. Llegamos a otra avituallamiento en el Km 32, 5 horas después de haber tomado la salida. Azúcar en 89 así que me tomo mis 3 raciones de Isostar y 2 vasos de Coca-Cola. Empiezo a notar las ingles un poco cargadas, pero nada serio. Creo que las mallas de comprensión diferencial que estoy estrenando me están ayudando bastante. Salimos de nuevo por carretera. Cruzamos una urbanización y tomamos de nuevo una pista. Ya hemos dejado la montaña atrás, ahora toca llegar a Santa Perpetua. Me encuentro muy bien. El sol empieza a apretar un poco pero la verdad es que hay bastante sombra y aire fresquito. Llegamos al último control y avituallamiento en el Km 38, después de 6 horas. Azúcar en 77 (uff!), las 3 últimas de Isostar y 2 chuches (cuanto tiempo hacía!) para los últimos 4Km. Los últimos Km la verdad es que no son muy bonitos: autopistas, túneles, asfalto,... pero ya queda poco. Mi cabeza aún no se cree que llevando 40Km encima me sienta tan bien. Seguimos trotando hasta que cruzamos la meta las 14:11h! 6h 31min después de tomar la salida. Estoy súper contento y emocionado. Físicamente, me encuentro mejor que recién acabada una carreras de 10 o de 15Km! Y azúcar en 98 mg/dl! Que regalo de día!


Se que gracias a Emili pude disfrutar tanto de este día y llegar tan entero al final. Seguro que de ser por mí, hubiera empezado corriendo y en el Km 25 ya con las piernas cansadas, hubiera llegado  muerto a la meta y seguramente más tarde! Con mucha tranquilidad, disfrutando de cada Km, hablando con compañeros, compartiendo historias,... así es como he vivido mis primeros 42Km, y la verdad es que no podían haber ido mejor! También quiero dar las gracias a la organización (CESP y CEI) y a los voluntarios que nos animaron en todo momento!
Ah! Y de regalo, glico en 5,6%! Yuhuuu! 

lunes, 30 de septiembre de 2013

Cursa del Cérvol y algo más!

La carrera tuvo lugar el pasado 29/09 en Vallirana. Una carrera de montaña, durilla por el sol que pegaba pero con un final feliz!

El miércoles anterior fuimos con Clara ha hacer el recorrido. Llegaba de unos días en los que había tenido fiebre, gastroenteritis,.... dónde el ibuprofeno y la  amoxicilina no me ayudaban mucho a estar al 100%. Me encontraba flojo pero con ganas de hacer el recorrido. Por otra parte, en la web ponía que había un desnivel acumulado de 522m, así que iba con la idea de un entreno tranquilo y con desnivel moderado. Comenzamos el entreno, se hizo un poco tarde, así que nos tuvimos que poner el frontal al poco de empezar. De repente me encontré con una rampa que no acababa nunca. Me desmotivé un poco, ya que como decía iba con la idea de algo tranquilo, era tarde, no estaba del todo fino y ya me desmotivé un poco cuando solo llevábamos 5Km... Pobre Clara que me tuvo que aguantar y andar más de lo que hubiera querido. Después de 2 horas, perdiéndonos unas cuantas veces, teniendo que bajar con cuidado por unas trialeras que eran bastante técnicas y encima de noche con el frontal,...cuando llegamos al coche, nos fuimos directos para casa.
Como os podéis imaginar no me quedé con buenas sensaciones para la carrera. Creo que al pensar que iba a ser algo bastante llano y tranquilo, y encontrarme con esas 2 rampas interminables con mi cuerpo y mente al 50%, me mató.


Vista de Vallirana des de la cima
Reconociendo el trazado!

 Suerte tuve al día siguiente que pude cargar pilas al 100%. Tuvo lugar la 5k@EASD, una carrera de 5Km para "cambiar la diabetes". Allí tuve el placer de conocer por primera vez a algunos/as grandes Diatlétics. Quiero aprovechar para mandarles un saludo y abrazo a todos ellos y decirles que estoy esperando ese email para encontrarnos de nuevo!


Participantes de la 5K@EASD
 
Corriendo los 5Km en el Estadi Olimpic con Emili detrás!

Así que con los ánimos un poco más altos, me planté el domingo en Vallirana. En esta carrera iba a correr con la ya archiconocida Clara, mi compañero de entrenos Marc y un gran triatleta y ironman amigo de mi pueblo, Xavi. Una vez allí, me volvieron de nuevo a la cabeza esos momentos malos del entreno con Clara. No estaba muy motivado, supongo porqué intuía que no la podría disfrutar ni hacer un buen tiempo.
Control de azúcar antes de la salida: 201 mg/dl! Y salimos. Xavi estaba en primera línea así que no lo iba a ver hasta la llegada a meta. Clara y Marc salen bien y yo me quedo estancado en el mogollón (pensándolo ahora, supongo que la falta de motivación me hizo salir de los últimos). Eran las 9:45h y el sol ya picaba un montón. Iba a ser una carrera durilla con ese sol apretando tanto. Empecé a correr tranquilamente, tampoco me encontraba muy bien. Después de 1,5Km de asfalto, dónde ya me encontré con Marc (el pobre hacía unos cuantos días que no entrenaba y no estaba a tope), ya entrabamos en la montaña. A los 3Km me volví a encontrar con la primera y famosa rampa. Conociendo lo larga que era (1,5Km más o menos), me puse las manos en las rodillas des del primer momento y no paré hasta llegar arriba. La verdad es que fue muy buena idea, ya que no tengo la forma física como para poder correrla entera, y de esa manera llegué arriba bastante fresco y ganando muchas posiciones. Al final de la subida ya veía a Clara y empezaba a sentirme mejor. Ahora nos esperaban bajadas y más bajadas hasta el Km 7.5. Ahí empezaba otra subida hasta el Km 10, y ahora sí, me encontraba bien. Empezamos por una trialera muy bonita para luego acabar subiendo hasta la cima por pista. Ahí atrapé a Clara. Hablamos un poco y nos dimos ánimos. Llegamos arriba y yo paré un ratillo en el avituallamiento a beber mucha agua ya que estaba muy muy seco. Ahí perdí de nuevo a Clara. Ahora nos esperaban 5Km con un par de repechos y una bajada constante hasta la meta. Bajamos por una trialera muy técnica y bonita dónde lo di todo. Luego seguimos un poco más por pista y ya llegábamos de nuevo al pueblo. Ahí volví a ver a Clara. Deberían quedar unos 700m hasta la meta. Esa fue mi motivación para dar un punto más y apretar al máximo. Apretaba  y adelantaba a gente pero ella parecía ir al mismo ritmo que yo, no podía pillarla. Pensé en dejar de apretar por unos momentos, ya que no veía que me acercara, pero decidí seguir apretando. Cuando quedaban unos 200 metros, veía que me acercaba  y que ya estaba más cerca. Justo cuando quedaban 50 metros y una curva para la llegada conseguí pasarla y entrar a meta! Conseguí acabar en 1h 31min 16seg y con el azúcar en 121 mg/dl ! Clara entró 8 segundo después y Marc tardó solo unos 7 minutos más. Xavi ya estaba recuperado, esperándonos a la llegada. Él había terminado en 1:20, dentro del Top 10, aún teniendo la rodilla jodida.
La verdad, no me esperaba disfrutar tanto de esta carrera. Me imagino que al no albergar ningún tipo de expectativas ni presión y encontrarme mucho mejor con el paso de los quilómetros, hizo que al final me lo pasara tan bien!



Por ahora creo que ya no voy ha correr tantas carreras de estas distancias. Llevo unos días controlando bastante bien el azúcar en entrenos más largos largos y esta ha sido la razón para apuntarme a la Mitja Volta (43Km +1600m) de la UltraTrail Collserola. En los entrenos largos tengo unas sensaciones muy distintas, siento que estoy mucho más en contacto conmigo, a cuando hago 10 o 15Km. Me parece que le estoy pillando el gustillo a eso de tirar horas, y ahora tengo que preparar mi cuerpo para ello. Así que este domingo haremos una Marxa de 41,8Km con mi madre y Emili para empezar a conocer la distancia. Estoy muy contento con este nuevo horizonte!
 

lunes, 9 de septiembre de 2013

Barcelona Midnight Trail

Tenía muchísimas ganas de hacer esta carrera. La carrera de 14Km tuvo lugar en el parque de Collserola, con salida y llegada al Tibidabo, el pasado 6 de Septiembre a las 21.30h.

El miércoles 4 de Septiembre, quedamos con Clara J y una amiga suya para hacer el track. La verdad es que nos lo pasamos muy bien, disfrutamos del recorrido, y a parte de las 3 rampas seguidas durante 700 metros, vimos que el recorrido era bastante asequible. Hicimos un tiempo de 1h 33min 20seg.

Y llegó el día de la carrera. Era una carrera que tenía muchas ganas de hacer por varias razones: era mi primera trail nocturna, era por el parque de Collserola y dónde también corrían, por una parte Clara con quién ya compartí la carrera del Miner de Ferro, y con mi mejor amigo del colegio, Pol. Con Pol retomamos de nuevo el contacto hace muy poco gracias al trail y nos íbamos a ver después de muchos años.

Eran las 19.30h y cogí la moto para ir hasta el parque de atracciones del Tibidabo, donde tenía lugar la salida y llegada. Llegué a las 20h, justo hora y media antes de la carrera para tomarme mi bocadillo de jamón en dulce de 6 raciones.

Tomando mis raciones pre-carrera!

Empezaba a oscurecer y los nervios crecían un poquito dentro de mi estómago. Me encontré con Pol, Clara y Mireia (la amiga de Clara con quién ya hicimos el track) y estuvimos un rato hablando antes de la salida. 



Con Pol


Con Mireia y Clara
La salida se hacia en 2 tandas de 500 personas, con una diferencia de 10 minutos. Todos teníamos dorsal para salir en la primera tanda excepto Clara que se coló ya que no quería hacer la carrera sola!
Encendimos los frontales (azúcar en 191 mg/dl) , 3, 2, 1... Pam! Sale todo el mundo escopeteado. Pol ya se había colocado en las primeras líneas y ya no lo vi en toda la carrera. Nosotros nos habíamos colocado en el medio del grupo y tuvimos que esperar un rato para salir. Sabía que en el segundo quilómetro, se entraba en el único pequeño senderillo y que ahí se iba a formar una buena cola si no me ponía las pilas antes de llegar ahí. Así que me apreté la mochila y empecé a tirar y a pasar por dónde podía. Había muchísima gente y la pista no era muy ancha, pero más o menos se podía avanzar. Adelanté a bastante gente antes de llegar al sendero. Era un sendero de unos 700 metros, casi todo en bajada. Era casi imposible avanzar, y menos de noche... Así que con calma y paciencia fuimos bajando y me fue bien para recuperar esos dos primeros quilómetros que apreté. Al final del sendero subimos unos metros por la carretera y ya tomamos la famosa Carretera de las Aigües (es como la Rambla Catalunya, ancha y llena de gente, pero en la montaña). Ahí nos esperaban unos 5Km de pista con bajadas y rectas. La vista era preciosa. Se veía toda Barcelona iluminada a tus pies. De golpe, me di cuenta que cada vez veía menos y menos. Todo el polvo que levantábamos al correr se me pegaba a las gafas! Me las tuve que limpiar millones de veces durante la carrera!! Seguíamos en esa pista, me encontraba bien, tomándome mis pastillas de azúcar cada tres quilómetros, pero me daba cuenta que estaba yendo más rápido que nunca. A los siete y pico miré y estaba yendo de media por debajo de los cinco minutos el quilómetro. Nunca había ido por debajo de los cinco minutos durante 7 quilómetros! Por una parte me alegré, pero por otra pensé que me podía pasar factura... Pero como tenía el recuerdo de que era asequible, seguí tirando. Llegamos a la parte más bonita de la carrera, paré de correr, saqué mi zumo de piña y empecé a andar a buen ritmo. De primero, una buena rampa de asfalto.. a cada paso que dabas aquello parecía levantarse cada vez más. De segundo, el plato fuerte, una escalera de 434 escalones. Y de postre, otra rampita de pista, hasta llegar a la torre de comunicaciones. No se cómo pero llegué bien arriba, incluso con ritmo para seguir tirando. A partir de allí ya no había muchos grupos y algunos metros los hacía en solitario. Era espectacular! Seguíamos bajando por pista hasta los once quilómetros. En los entrenos yo no recordaba ninguna pendiente de subida que mereciese ser recordada, a parte de las últimas tres curvas. De repente, recordé que durante el entreno un chico nos pasó y nos dijo que esa pista era un falso llano, aunque para mí fue un verdadero llano. Pues bien, el día de la carrera se convirtió en el llano más falso de mi vida! Supongo que al no recordarlo así aún fue más duro de lo que realmente era. Iba por el quilómetro doce y estaba pensando en empezar a andar ya que me dolían las dorsales, los isquios y no veía que ese maldito falso llano fuera a acabar pronto. Decidí desconectar mi cabeza y seguir tirando. Por suerte, llegamos de nuevo a la luz de las farolas, lo cual indicaba que quedaba menos de un quilómetro. Quería empezar a apretar y quemar mi último cartucho pero no lo encontraba por ninguna parte. Además, tenía que ser la primera carrera en la que nadie me iba a estar esperando en la recta final animándome, así que tampoco tenía ese aliciente extra para tirar un poco más. Finalmente, llegamos a las tres últimas curvas en subida antes de la meta. Iba en un grupo de tres. Ellos bajaron el ritmo pero mantuvieron la carrera, y yo volví a andar. Ahí un policía me gritó: No pares ahora! Que te queda nada y menos! Aprieta! Quería pero no podía. Aún así, llegamos a la primera curva los 3 juntos. En esa curva, una mujer que se dirigía al parque andando me gritó de nuevo: No puedes parar ahora! Tienes que darlo todo! Adelántalos! Y por suerte hizo que encontrara mi último cartucho por algún sitio. Adelanté a los 2 antes de la segunda curva, adelanté a un grupo de tres en la última curva y justo estaba adelantando a otro en la recta, cuando escucho: Vinga Àlex! Corre! Corre! Era mi madre chillando como siempre y animándome hasta el final. Resultado: 1h 22min 24seg!


No me lo esperaba y me hizo muchísima ilusión. Al cruzar la meta me encontré también con Emili, con quién estuvimos hablamos un poco de la carrera.




Con Emili a la llegada
 Llegué KO pero con el azúcar perfecto: 86 mg/dl (suerte de ese zumo)! Mientras estaba ahí medio tirado llegaron Clara y Mireia, tan solo 5 minutos después (1h 27min 3seg). Están hechas unas campeonas!
Después me encontré con Pol, que había hecho un tiempazo 1h 12min 45seg, con quién nos veremos de nuevo el 22 de Septiembre para la Cursa de Sant Miquel en nuestro pueblo, Molins de Rei.


Después de la carrera hubo una fiesta AFTER RUN, dónde comimos un poco, escuchamos música en directo y esperamos llevarnos algún regalo que no llegó...


Fiesta AFTER RUN
Antes de empezar la carrera, no me podía imaginar un final mejor . Me había propuesto hacerla por debajo de 1h 25min si me encontraba muy bien, pero durante la carrera, sobretodo en el segundo tramo, no lo veía nada claro. No esperar a nadie en la llegada y encontrarme a mi madre y Emili allí fue un pedazo de regalo! Poder compartir estas carreras con gente que has vuelto a encontrar en tu vida gracias al running, no tiene precio! Y si encima el azúcar te deja disfrutar y finalizar la carrera, es para tirar cohetes, así que yo los tiré y espero seguir tirándolos.